Re(t)al soñado
Hoy te soñé de nuevo, me abrazabas fuerte y no dejabas que cayera. Tu mirada era limpia e inocente, tus manos temblaban pero me agarraban firmes.
Para los demás no existes. Eres un amor secreto, un amor incomprendido, un amor desconocido. Quizás sea ese el motivo, por el que tu presencia es tan intensa. Por unos minutos, te siento dentro. Me entregas caricias, me transmites ilusión, me regalas sonrisas.
Paseamos de la mano, recolectamos flores, corremos libres, carcajadas desbordan el aire. Nos revolcamos en fresca hierba, agotada de reír, me detengo primero. Te sientas cerca, tocas mi espalda y con torpeza trenzas mi pelo.
Me miras, me preguntas cuestiones que no sé responderte. Te preocupan cosas que se escapan a la razón. Por un instante, pareces triste, no te reconozco. No quiero verte así.
Acierto a decirte que el tiempo se detiene a tu lado. Te miro y quisiera no despertar, deseo compartir para siempre mi corazón, mi alma, mi abrazo.
En mi sueño, acabas desapareciendo. Siempre te marchas andando por un largo sendero. Yo te observo partir hacia el vacío. Me quedo ansiosa esperando ese trance, ese último momento de tenerte cerca. Cuando ya no puedo sentirte, entonces, te detienes. Entonces, me miras con culpa y tus ojos me dicen que otra noche volverás a buscarme. Alivio la angustia de tu adiós con un suspiro. Me empeño en controlar mi fantasía. Intento provocar de nuevo el encuentro, pretendo robarte un último beso. En el fondo sé que acabó, debo dejarte ir. Acepto que esa noche fue un regalo, inesperado.
El destino dispuso que nos veamos de esta manera. Voy entendiendo que aunque doloroso, esos incontrolables encuentros me ayudan a seguir. Despierto sobresaltada, descubro mi cara mojada. Feliz porqué otra vez te disfruté. El recuerdo de tu piel es tan reciente, que aún te siento cerca, pareció tan real... En pocos segundos, ese calor se transforma en hielo en mi interior. Entonces soy consciente... volví a perderte, nunca te tuve.
Me sorprenden esas emociones, que siguen vivas al despertar. Emociones que me llevan a comprender cómo yo, en silencio, siento tu ausencia. Ése es, sin duda, el desafío más complejo: admitir, concebir, una existencia sin ti. Mientras batallo con esta realidad, sigo esperándote... en mis sueños.
PESPUNTE
Resulta asombroso como algunos sueños pueden revelar ciertas emociones. Mientras dormimos, aparentemente pasivos, aparentemente quietos. Entramos en un mundo que nos transporta, donde todo se hace posible. Viajamos a lugares nuevos o lugares cercanos. Nos encontramos con personas familiares o desconocidas. Revivimos situaciones o las afrontamos por primer vez. O bien, nos adentramos en experiencias inexplicables.Al soñar fantasía y creatividad se desatan, los miedos se desvanecen. Ese lugar que nos hace sentir invencibles, poderosos.
Al soñar nos encontramos en un espacio donde la mente se libera para gestionar: emociones, preocupaciones y deseos. En un universo que parece irreal, se refleja nuestro pedazo más reservado, la parte más inconsciente del ser. Esa parte que despiertos, no llegamos a conocer.
Algunas veces... prestar atención a un sueño, ayuda a observar, ayuda a analizar, ayuda a solucionar, ayuda a comprender.
Una vez más me dejas sin palabras... Sólo soy capaz de decirte: gracias. Gracias de verdad.
ResponderEliminarMíriam, muchas gracias a ti por leerme. Un fuerte abrazo guapísima
EliminarIncreíble, me ha encantado. Impresionante.
ResponderEliminarNora Steele,
http://lalocuraenjaulada.weebly.com/
Muchísimas gracias, supongo que también eres soñadora Nora Steele. Un abrazo
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